Los cables que wikileaks han compartido al mundo representan la forma en que Estados Unidos mira sus intereses (porque ningún país tiene amigos ni enemigos). A diferencia de quienes consideran negativo que estos contenidos se compartan soy de la idea que ningún Estado debe tener secretos por una sencilla razón: los secretos pertenecen a las personas.
De forma simpática aunque todos los cables están disponibles, apenas conocemos lo que los medios masivos deciden hacer relevante y todo lo demás queda por fuera. Después de eso, por irónico que parezca, las intimidades ventiladas son compartidas con el debido formato o edición periodística, la cual como toda acción humana, tiene voluntad de favorecer a unos y afectar a otros.
En ese contexto hemos visto como los villanos de siempre se consagran como lo peor del momento y los amigos de la agenda editorial son enaltecidos... pero no por amistad; obvio que por interés ¿De qué? No sé, especulemos.
Pero no quedamos ahí, creemos lo que ya suponíamos y consideramos falso lo que estropea nuestra visión de mundo. Por eso es que cuando el cable afecta nuestros valores "es una filtración falsa que forma parte de una conspiración" y cuando le parte la quijada a la agenda del enemigo no requiere pruebas porque es verdad contundente.
Y así se construye todos los procesos de información que dan vuelta en mi cabeza, la tuya, la de él, la de ella, la de nosotros y la de ellos....